En Argentina la prevalencia de hipertensión arterial en la población adulta (mayor a 18 años) es de 36,3%, es decir casi 4 de cada 10 personas son hipertensas. El 30% de las muertes en nuestro país son por causa cardiovascular, siendo la hipertensión el principal factor de riesgo.
Se considera que hay HTA, cuando la presión arterial máxima es mayor o igual a 140 mm Hg o cuando la presión arterial mínima es igual o mayor a 90 mm Hg.
La falta de control aumenta el riesgo de daño al corazón y a los vasos sanguíneos de diferentes órganos pudiendo provocar infartos de miocardio, accidentes cerebrovasculares (ACV), enfermedad coronaria, insuficiencia cardíaca, y enfermedad renal crónica, entre otras.
La mayoría de las personas con hipertensión no presenta ningún síntoma; por eso es de fundamental importancia asistir a los controles periódicos de salud y conocer los valores de presión arterial que permitirán llegado el caso, realizar un diagnóstico temprano y el tratamiento oportuno que permitirá controlarla.
Existen seis medidas a adoptar para minimizar las probabilidades de padecer hipertensión y sus consecuencias adversas.
Estos pequeños cambios ayudan a mejorar la calidad de vida y las complicaciones:
Es importante enfatizar que la prevención y la detección temprana de la Hipertensión Arterial no sólo es posible, sino que son dos formas certeras de evitar o minimizar sus consecuencias mortales y/o discapacitantes, ayudando a mejorar la calidad de vida de las personas y contribuyendo a lograr comunidades con más salud.
La cartera sanitaria invita a la comunidad a acercarse a controlar la presión arterial en los centros de salud de toda la provincia.
Salud remarca también la importancia, para quienes sufren de hipertensión, de respetar el tratamiento sostenido de la medicación y los hábitos saludables.