El país visitado concentra, desde julio del 2018, un área oceánica protegida que aumenta su amplitud paulatinamente mostrando beneficiosos avances.
El objetivo principal del viaje fue estudiar los procesos para su creación, funcionamiento, resolución de posibles conflictos y el manejo de la pesca tanto fuera como dentro de las áreas creadas.
El subsecretario de Pesca, Jorge Bridi, que fue parte de la comitiva que participó de la misión, la cual concluyó que varias ideas aplicadas en Australia son exportables a las costas argentinas.
“Los representantes del sector pesquero que asistimos coincidimos que, aunque Australia consiguió crear la mayor Red de Áreas Marinas Protegidas, casi sin perjudicar a la pesca, no podemos extrapolar linealmente la experiencia a los mareas argentinos dado las enormes diferencias que existen, no solo en la relevancia de la actividad pesquera oceánica -de muy escaso volumen en Australia- sino también por lo diferente de los ecosistemas de aguas templado cálidas en Australia y frías en el Atlántico Sud Occidental. En nuestro caso los hábitat no se encuentran tan definidos ni limitados y los ecosistemas son tan extensos que se superpones al punto de relacionar la totalidad de la Plataforma Continental Argentina”, señaló Bridi.
Igualmente “hemos podido conocer de primera mano la administración e investigación pesquera australiana y nos hemos traído varias ideas. Alguna de ellas ya las estamos conversando con los técnicos de INVAP para avanzar en los diseños de algunas soluciones tecnológicas a problemas de la pesca y de la administración pesquera. También resultó de suma utilidad conocer los extensos procesos de generación de consenso que se desarrollaron por un período de 20 años y terminaron con un sistema que protege el ambiente sin ocasionar serios problemas a las actividades”, finalizó.
Los conocimientos adquiridos resultaron de gran aporte, y significa un motor de búsqueda para comenzar a regular la Plataforma Continental Argentina y la actividad pesquera.