El mes pasado, el Ministerio de Salud de la Provincia adhirió al protocolo implementado por Nación para la internación domiciliaria de pacientes sin sintomatología o con síntomas leves. En Cipolletti esta tarea se realiza con equipos médicos que recorren la ciudad y evalúan el estado de cada paciente en esas condiciones.
Este seguimiento se realiza telefónicamente todos los días y con visitas domiciliarias, en primera instancia para corroborar que el paciente esté cumpliendo el periodo de aislamiento y, además, como evaluación del estado de salud o para ver si la persona requiere de alguna medicación o atención especial.
Al respecto, el doctor Domingo Chirino, quien realiza visitas domiciliarias junto a la enfermera Mónica Álvarez, explicó que los pacientes que se visitan se encuentran en estado leve, “son pacientes que no tienen comorbilidades y se pueden manejar de manera ambulatoria”.
En caso de detectar cambios en sus estados y agravamiento en sus síntomas “nos comunicamos con el hospital, quien se encarga de enviar una ambulancia al domicilio y trasladarlo a la internación” para una mayor atención, agregó Chirino.
Por su parte, Álvarez, destacó como positivo el comportamiento de los pacientes que se encuentran cursando la enfermedad en sus domicilios y expresó que “hasta el momento no hemos tenido inconvenientes. Siempre que nos acercamos están presentes”.
Agregó que el trabajo es intenso y que se llegan a realizar entre 40 y 50 visitas domiciliarias.
Finalmente, la enfermera indicó que más allá de esto se observa que “cuesta tomar conciencia” y que se trata de un arduo trabajo que para que tenga buenos resultados debe ser en equipo. “No solo el equipo de salud sino de toda la población en general. Es necesario que todos tomemos conciencia y respetemos las medidas de prevención”.
Cabe señalar que este tipo de internación es decidida por el equipo de salud tratante y dependerá de las posibilidades de asegurar aislamiento al enfermo en su hogar y de tener un pronto acceso a la atención ante cambios en su estado de salud. Quedan exceptuadas de este tipo de internación todas las personas de riesgo como mayores de 60 años, embarazadas o pacientes con enfermedades crónicas, (diabetes, hipertensión, obesidad o personas inmunosuprimidas, etc.) las que sí deberán permanecer internadas en instituciones sanitarias.
Asimismo, se remarca que esta medida requiere un alto grado del cumplimiento de los criterios establecidos para su indicación y el compromiso del paciente y los convivientes para que el aislamiento en el hogar sea respetado.