La campaña, conocida como REDE, está centrada en obtener datos críticos sobre la abundancia y la estructura poblacional del recurso merluza, así como obtener información sobre las condiciones generales del ecosistema en el golfo. “Queremos conocer el estado actual del recurso, analizar el impacto de las medidas que hemos tomado, a los efectos de evaluar si existe o no recuperación del stock”, explicó Jessica Ressler, subsecretaria de Pesca y Producción Acuícola.
El buque investigación, contratado por la provincia al INIDEP, comenzará sus tareas el 1 de noviembre, navegando áreas estratégicas del Golfo San Matías para obtener muestras y datos biológicos que permitirán verificar la efectividad de las políticas de protección implementadas en los últimos años.
Además de la Subsecretaría de Pesca, el INIDEP y el CIMAS participan activamente en esta investigación, aportando su conocimiento y experiencia en estudios pesqueros y biológicos. Esta cooperación interinstitucional busca asegurar una recolección de datos rigurosa que permita tomar decisiones basadas en evidencia científica.
Con el análisis de los resultados, se espera ajustar o fortalecer las políticas de manejo de merluza y promover la sustentabilidad de este recurso en el mediano y largo plazo. La información obtenida también permitirá evaluar la situación de otras especies importantes en el ecosistema del golfo, contribuyendo a una visión integral de la biodiversidad marina en la región.